Los post de la semana:

lunes, 14 de febrero de 2011

El infierno japonés o jigoku.

Igualmente que en muchas culturas, Japón posee un infierno que lleva como nombre jigoku (Se pronuncia Digoku). Se creía que éste tenía dos entradas, una, por grietas cercanas a las orillas marinas y la otra en una gran pendiente cerca a la provincia de Izumo.


Realmente, el Shintoismo (Religión antecesora al Budismo) no parecía preocuparse mucho por la muerte, ni por el concepto de recompensa o castigo, todo ello era desconocido, pues preferían situarse en el presente y no en salvaciones remotas. Fue entonces aproximadamente en el año 552 que el Budismo entro en Japón dando aquel concepto de recompensa y castigo a sus seguidores, en aquel punto se desarrolló un concepto de infierno muy similar al universo cristiano de la condenación, el mundo de los pecadores; El jigoku, compuesto por dieciséis regiones, ocho de fuego y ocho de hielo.


Castigos: Al ser juzgados por Enma-ho (Soberano del jigoku) quien recibe a los varones y su hermana que recibe a las mujeres, les es asignado una de las dieciséis regiones tras el juicio según las ofensas cometidas. El ofensor, ve sus errores en un gigantesco espejo haciéndolo revolcarse del remordimiento.


Salvación: La única manera de salvarse es a través de la intersección de Bosatsu o Bodhisattvas, entidades santas que ya alcanzado su máximo nivel de iluminación aplazan su llegada al nirvana con la intención de ayudar a todos los seres orientándolos hacia un estado más ilustrado.




3 comentarios:

  1. Muy buena la historia, y bien redactada, escrita explico prácticamente todo; el castigo el remordimiento y los espíritus de mas alta clase los salvadores, es tan interesante que lo deja a uno con ganas de leer mas.

    ResponderEliminar
  2. Gracias por el articulo, un abrazo; es de mucho interes y al mostrar los nombres nativos en la tradicion, estamos accesibles a una amplia bibliografia al respecto

    ResponderEliminar